Las señales: Instrucciones para el viaje de la vida

Hoy profundizaremos algo más sobre la aplicación práctica de las señales. Las creencias internas que albergamos tienen una energía propia, un patrón vibracional que sistemáticamente enviamos al universo, y que por ley de correspondencia, vuelve a nosotros en forma materializada o de experiencias. Si ocupamos la mente varias horas al dia con pensamientos de tristes, todo lo que nos llame la atención estará teñido de tristeza. Los pensamientos son modificables y manipulables pero los sentimientos no, pues son una consecuencia natural de lo que pensamos.

 

sueños_señalesSi interpretamos la realidad de lo que nos llama la atención, esas «casualidades» que inundan nuestras vidas, tendremos una lectura o diagnóstico de las vibraciones que estamos enviando, y podemos prever lo que nos va a acontecer más adelante. El «darse cuenta» mediante la interpretación simbólica de mi experiencia física, es, junto a la de los sueños, el regalo más útil que conozco para evitar las decisiones inconscientes negativas y sus consecuencias no deseadas, y alimentar las beneficiosas. Se trata de identificar en el plano físico y de la experiencia diaria, los modelos de comportamiento que no deseamos y modificarlos internamente, para asi poder transformar esa experiencia diaria de dificultades y dudas en felicidad y plenitud.

 

El Domingo pasado paseaba con mi hermana a mi perro Platón por El Pardo, y manteníamos una interesante conversación sobre un suceso que me ocurrió el dia anterior en una fiesta. Cuando se pide algo al universo, éste te lo sirve exactamente como lo has pedido. Muchas veces el secreto de materializar lo que uno desea no está en lo que pides, sino en lo que aceptas para ti como bueno. Lo que yo solicité me había venido en forma de una persona que parecía la respuesta exacta a mi «pedido», pero había un detalle, que en su dia no especifiqué, y que se me había servido»de regalo» y que yo no deseaba. Lo que parecía algo sin importancia resultó ser la lección más importante que debía aprender. Sinceramente no tenía ni idea como arreglar la situación, y como siempre, decidí poner una vez más en manos del universo que me proporcionara la respuesta perfecta, la solución adecuada para todo el mundo.

 

No había pasado ni media hora que nos sentamos en un restaurante y pedimos dos gazpachos. Nos trajeron uno inmejorable pero con la salvedad de que no estaba pasado por el chino para eliminar las pieles y los grumos. Avisé al camarero y le pedí que o lo pasaba por el chino o que me trajera otra cosa, sugiriéndome él los espárragos. Se deshizo en excusas pero yo me mantuve, no iba a aceptar un gazpacho de sabor buenísimo pero sin filtrar. Mientras yo reafirmaba con vehemencia que conformarse con lo que uno NO quiere es como decirle al universo que traiga más de lo mismo, vino el jefe del restaurante diciendo que perdonara el descuido y que en la cocina estaban pasando el gazpacho por el chino. Cuando volvió «mi pedido», era el mejor que había tomado en todo el verano, pero necesité devolverlo y expresar exactamente lo que deseaba y no aceptar como buena una situación que claramente no me satisfacía.

 

Como observé que aquéllo que parecía no tener ninguna importancia me había movido emocionalmente, en ese mismo instante me di cuenta de que el universo ya me contestaba mi pregunta de manera perfecta y en forma de gazpacho! Me informaba que aceptar algo para mi misma que no me satisface es como decir al mundo que lo amas y como consecuencia te da más de lo mismo. Las creencias son energía que acaba materializándose en vivencias en el plano físico.

De nada sirve pedir al universo por ejemplo un trabajo creativo, si cuando viene una oferta de trabajo tedioso y aburrido lo aceptas como bueno para ti por miedo a no encontrar otro, por agradar a terceras personas, o simplemente porque en el fondo de tu corazón no te crees capaz de realizar ese tipo de trabajo que te haría feliz. Lo que crees de ti mismo es lo que recibes. Cambia la idea inicial y tu experiencia también cambiará. El mundo es un reflejo de tus verdaderas creencias, la mayoría de ellas inconscientes, y no de lo que deseas. En realidad, cuando deseas algo es señal de que no lo tienes, y si no lo tienes en tu interior, el universo no te lo puede servir. Es como los bancos. Sólo prestan dinero a quien lo tiene, pero primero tienes que aceptar que tú eres merecedor de ello. Si aceptas en tu vida alguna circunstancia que NO te gusta y que te hace infeliz, en tu experiencia física encontrarás infelicidad y frustración. Dices al universo que «amas» la infelicidad y por lo tanto te la servirá en bandeja. 

 

Para que el proceso sea completo y que esa circunstancia no se repita de nuevo, hay que hacer el trabajo de interpretación con lo que el universo sirvió en un principio, en mi caso que pongo hoy como ejemplo, debo especificar con boli y papel en mano , que es lo que NO me gustó de lo que obtuve, porque eso es lo que hay en mi y que debo modificar, ya que es MIO y de nadie más. Representa un modelo de creencia y comportamiento que no reconozco en mi porque es inconsciente, y debo eliminarlo primero antes de que el universo me lo pueda proporcionar en positivo. Lo que yo le diría a la persona para modificar eso que no me gusta de ella, es lo que debo hacer yo para conmigo misma. Cuando sigo yo mis propias instrucciones para el cambio que desearía para ella, mi patrón vibracional cambia automáticamente y pueden pasar tres cosas:

 

a.- Que me deje de atraer la persona en la que proyecto negativamente.

 

b.- Que esa persona modifique a su vez su actitud negativa por resonancia y se libere la tensión. Eso ocurrirá si hablamos de una relación profunda con una dosis de amor suficiente para ello, pues el amor es lo único que transforma y regenera.

 

c.- Que otra persona diferente y que SI posea ese patrón vibracional ya transformado, entre en mi campo de experiencia como proyección positiva.

 

En el dicho popular»Dios los cria y ellos se juntan». Si algo no es bueno para ti no lo alimentes. Y si no te gusta el gazpacho con grumos, no te conformes, pásalo por el chino». Modifica en ti aquello que necesitas, y el universo te lo servirá . El truco está en hacer consciente sistemáticamente lo que hay en tu inconsciente, porque es en base a él que se crea tu realidad dia a dia, y no en base a lo que conscientemente crees de ti mismo. La sombra es esa parte oculta de ti mismo que no conoces y que se manifiesta en sueños y señales. Éstos te dan en energía y símbolo el conocimiento de lo que puedes modificar a cada paso del camino para convertir en luz lo que hay de sombra (de desconocido) en ti.

 

Autora: Beatriz F. Del Castillo  Fuente:  holistika.net